Tan popular y conocida en todas las clases sociales es la simpatica figura de Sr. Vazquez que esta vez nuestro trabajo ha de resultarnos por demas facil y sencillo, pues su vida, consagrada enteramente al trabajo, tiene pruebas bien papables que ofrecer de su constante acyividad, sin que tengamos nosotros que esforzarnos en poner de relieve actos que son ya harto conocidos de todos-

Nacido en Sarria (Lugo), comarca en que el amor al trabajo es ya tradicional, y formando parte de una humilde familia, tuvo el Sr. Vazquez que luchar por naturaleza y por necesidad con las adversidad de la suerte, para lo cual, estimando estrecho campo para desenvolverse el del suelo natal, abandonò su querido hogar para lanzarse en el revuelto torbellino de la vida madrilena, trasladandose a esta Corte en 1859.

Nadie ignora lo mucho que seducen las grandes capitales a todo aquel que desea conquistarse una posicion, pero no es meno sabido de todos que estas solo logran conseguirlo aquellos que poseen una fuerza de voluntad inquebrantable, un decidido amor al trabajo, una inteligencia poco comun y una actividad incansable. Todas estas qualidades concurrian en nuestro biografado, y asi era de esperar que consiguiese abrirse paso y satisfacer en breve sus nobles aspiraciones.

No habia pues transcurrido mucho tiempo, y ya se hallaba al frente de un acreditado molino de chocolates y del almacen central de las Cuatro Calles, el que sucesiva y rapidamente ha ido hasta ponerlo a la cabeza de los establecimientos industriales de Madrid. No es esta sola la demostracion de su actividad y genio esencialmente industrial, sino que aun tiene en su apoyo la hermosa fabrica instalada en la calle de Caracas, con arreglo a los ultimos adelantos, en la que trabajan constantemente mas de cien obreros, y la non menos magnifica fabrica de galletas y bizcochos inaugurada recientemente en el proximo pueblo de Pozuelo.

Esto por lo que respecta al hombre industrial; pero si le consideramos particularmente, hallamos tambien en el grandes virtudes que admirar, pues aunque la fortuna que hoy posee se la ha labrado la fuerza de incesante y penoso trabajo, la vierte a manos llenas cuando se trata de remediar cualquier desgracia. Pruebalo su caritativo y noble proceder en Granada en los luctuosos dias de los terremotos donde acudiò como miembro del Circulo de la Union Mercatil, y cuyo valioso comportamento le valiò el titulo de hijo adoptivo de Santa Cruz de Alhama. De igual valia fueron tambien los servicios que prestò en la corte con motivo del colera en 1885, y tomando parte muy activa en la fundacion de la segunda Tienda-Asilo, a la que va unido su nombre.

Todas estas admirables dotes no habian de pasar, pues, inadvertidas de sus convecinos que le demostraron su confianza llevadole al seno del Ayuntamiento en las elecciones de la coalicion, haciendole figurar entre las mas ilustres personalidades de la politica española. El recuerdo de su digna gestion municipal no se borrarà facilmente de la memoria del pueblo madrileño, y nadie olvidarà que nuestro biografado ha cumplido en la Tenencia de Alcaldia del distrito de Buenavista con la misma honradez y laboriosidad que siempre ha demostrado en todas sus empresas.